martes, 13 de marzo de 2012

Sin Título, 45.


Aroma Caribe.

Ojos de fuego que en la penumbra
me abrasan,
que me atraen, me pueden, olor a espuma.


Piel, brisa, susurro a gritos,
vientre dorado, ardientes curvas,
arráncame de un mordisco
mi razón, toda cordura.


Lengua de plata, perfume de locura
para mis sentidos,
déjame escalarte en una tormenta
furiosa, de caricias y dulzura,
animal salvaje, pura violencia.


Hierro candente, jadeos, gemidos
escondidos en la oscuridad del paraíso,
Edén ardiente y húmedo, tan lleno
de ti, tan lleno de nosotros.

jueves, 8 de marzo de 2012

Sin Título, 44.


Besoin de respirer.

No puedes ocultarte,princesa,
ni correr, ni esconderte.
¿Cómo vas a lograrlo, si,
a cada momento,
apareces donde menos se te espera?


Te encuentro en el frío viento,
en invierno,
en las tardes oscuras y nubladas
que auguran lluvia sin tormento.


Te encuentro en la espléndida mañana
de primavera,
soleada y con una brisa fresca,
en las flores y su helada escarcha.


Te encuentro en ese aroma a placer
del verano,
en esos crepúsculos eternos en los que
el Sol no termina de esconderse.


Te encuentro, al fin, en las hojas caídas
de los árboles, en otoño,
en ese aire aún caliente que,
ah, me hace recordar tu piel y la mía.


Te encontré en cada grano de arena
de aquella playa;
en cada rayo de aquel Sol
que mi piel abrasaba,
en cada pliegue de las olas
de mi memoria.


Te encontré en cada Luna llena,
en cada noche de estrellas repleta,
en cada rincón oscuro en el que
nos perdíamos,
yo, bohemio, y tú, doncella.


Te encontré y te encuentro
en cada nota de cada pieza,
en cada vals de Chopin,
en cada de Debussy cadencia.


Te encuentro, y te encontré,
y espero seguir encontrándote,
en cada segundo,
y cada minuto,
cada hora larga,
cada momento níveo contigo
y cada instante perdido sin ti.


Y espero, princesa, que dejes a este pobre iluso que,
siendo un plebeyo vil,
se vuelva príncipe a tu lado.

jueves, 1 de marzo de 2012

Sabes qué es lo que te hace diferente de las demás?


Mira, aparte de la inmensidad de cosas que te hacen diferente del resto de mujeres (y no niego que efectivamente eres única)...

La cosa que de verdad que me hace quererte es que, pase lo que pase,
Pitbull nunca podrá hacerte un cover mientras estés cantando en la ducha.


Y eso me hace quererte por encima del resto de la gente.